¿QUÉ ES LA VEXILOLOGÍA?

Mi experiencia ‘Vexilológica’

Hace ya bastantes lustros, el jefe informativos de la emisora de radio en la que trabajaba me encargó una información sencilla para ese día. La típica pieza de minuto y medio a dos minutos, con dos ‘cortecillos’ (testimonios) y ya está. El tema era que en el Hotel de la Reconquista de Oviedo se inauguraba un congreso sobre vexilología. Como era y soy un poco inculto e ignorante, no sé muy bien por qué supuse, mal supuesto por cierto, que era una especialidad médica: neurología, cardiología, dermatología y… vexilología. Como por aquel entonces no existía San Google virgen y mártir y no siempre tenías tiempo, ni estaba a mano un diccionario enciclopédico en el que consultar, para el hotel de la calle Gil de Jaz me fui presto y dispuesto, pero… ¡ojito! sin saber que era la vexilología.

Mi primera sorpresa, y además descomunal, cuando llegué y pregunté a quién podía entrevistar sobre el asunto, fue descubrir que la vexilología es una disciplina auxiliar de la historia, que se encarga del estudio de las banderas en su más amplio sentido. O sea, ni especialidad médica ni ná de ná; el tema es el estudio de las banderas, y que por tanto y por cierto no tiene cura, ni sacerdote, ni tratamiento porque no lo necesita.

Como era y soy un poco inculto e ignorante, no sé muy bien por qué supuse, mal supuesto por cierto, que era una especialidad médica: neurología, cardiología, dermatología y… vexilología

Lo cierto es que enseguida me enganchó el asunto porque es muy interesante y pensé con buen criterio, y así se lo dije a mi jefe de informativos, que el asunto no solo daba para la pieza sencilla con dos ‘cortes’ para el diario hablado, que aquello tenía más ‘chicha’ y se merecía un reportajín más amplio. Así que volví al Reconquista por la tarde; asistí a algunas ponencias, entrevisté a más expertos vexilólogos y monté el reportaje. Entre otras muchas cosas aprendí que por ejemplo el color más frecuente en las banderas de los nuevos estados africanos, es el verde, que es el color de la esperanza y la razón es tan sencilla como que muchos de esos países fueron antes de ser independientes, colonias de Gran Bretaña, Francia, Bélgica, Holanda, España, etc. o sea países europeos y que la esperanza de independencia de las antiguas metrópolis dominantes, se representaba institucionalmente y de manera sutil y elegante utilizando el verde en sus banderas.

También aprendí en aquel congreso que las banderas, o muchas banderas, están repletas de simbología mítica y heroica para cargarlas de mayor relevancia y trascendencia. Por ejemplo una ponencia a la que asistí y me encantó, la dio un historiador de la Universidad de Zaragoza (no recuerdo el nombre lo siento) que desmontaba, con datos fidedignos y fiables la supuesta historia y origen, la leyenda, que envuelve el nacimiento de la bandera de Aragón y también de Cataluña y Mallorca, de fondo amarillo cruzada por cuatro rayas rojas. El profesor aseguraba que esa bandera tuviera su origen, hubiera nacido en el transcurso de una batalla en la que Jaime I ‘el Conquistador’, herido de muerte, se echó mano a la herida por la que sangraba abundantemente y pidió que le acercaran el pendón de sus tropas, que era amarillo, y con sus cuatro dedos de la mano, manchados de su sangre y ya agonizando (ahí la mítica y la importancia de la leyenda) los pasara por el paño dejando esa huella de cuatro rayas rojas sobre fondo amarillo. Y de ahí que sus huestes, vasallos y seguidores tomaron la nueva señera, la adoptaran como bandera.

Pero va a ser que no. Según aquel profesor de la Universidad de Zaragoza, que se explicaba muy bien y recuerdo que daba gusto oírle contar las cosas, por eso me quedé a escuchar su ponencia. El objetivo no es mentir, no es una manera fina y elegante de vestir la verdad, de adornarla, de enriquecerla, con mucha mítica, mucha leyenda y mucha emoción y más para dar más sentido a la simbología a una bandera que siempre es santo y seña de muchas cosas, pero muchas. Muchísimas. ¡Ojo! se mata y se mata mucho, se ha matado mucho y por desgracia se seguirá matando solo por defender una bandera, no nos olvidemos de eso, por favor.